En la actualidad seguimos con las marchas para poder presionar por una educación de calidad y cada vez que se convoca a estas, se sabe desde ya que terminaran con destrozos a la propiedad pública y privada y es aquí donde surge el cuestionamiento, todos tenemos claros que existe el derecho a manifestarse, la cuestión es el cómo se manifiestan.
Todos tenemos claro él porque de la manifestación, pero en la manifestación en sí, existen personas que no tienen claro el propósito de la misma, asisten a ellas con el simple propósito de destruir y atacar a las fuerzas públicas, siempre llevando un pañuelo en sus caras, son los denominados encapuchados.
Es por estos sujetos que las marchas se llevan a cuestionamiento, la gente de los sectores por donde pasan las diferentes marchas se preguntan ¿Por qué autorizan marchas por aquí si me van a destruir mi hogar o mi fuente de trabajo? ¿Quien se hace responsable de los daños a mi propiedad?
Estas son las principales interrogantes, la mayoría de los encapuchados que asiste a las marchas queda impune, y vuelven a asistir a las siguientes convocatorias.
Mi opinión es que debe haber un responsable, debe haber una cara visible que se haga 100% responsable por las cosas que suceden en una marcha, creo que la persona que convoca se debe hacer cargo de todo del orden de la marcha como de los perjuicios que esta pudiera provocar, porque si las cosas siguen así cada vez que se convoque a una movilización habrán destrozos, en cambio al haber una cara visible y responsable esta deberá resguardar el comportamiento de la masa, para que la marcha se desarrolle con normalidad.
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Enviado por: Álvaro Jiménez Olea, estudiante Pedagogía en Educación Física. Universidad del Bío-Bío, Chile.