Escrito por: Lindsey Balagué. Universidad del Bío-Bío, Chile.
Aunque suene cruel para aquellas personas que se criaron en un ambiente de religión, el Demiurgo expuesto en la biblia no es más que un invento fracasado, en donde se relatan una serie de acontecimientos y reglas mal hechas, que a su vez poseen ciertas contraposiciones que demuestran el origen del mal, creado por el cristianismo para llegar al poder de todos nosotros, puesto que es más fácil controlar a entes estúpidos que a seres pensantes.
Al hombre, en su espíritu de curiosidad, siempre le ha intrigado el origen de todo lo existente, o sea, la creación.
Es así como en contra de cualquier ley el Cristianismo con el afán de dar satisfacción a la curiosidad del ser humano y controlar sus acciones a través de reglas impuestas se sale de lo Eterno, de la Nada, para engendrar a Dios, este Dios que según los cristianos y religiosos es bondadoso, piadoso… y todas las cualidades que lo hacen ser un Dios bueno.
Lamentablemente esta mentira tan bien planeada y tejida por entes de la época, posee muchos errores, los cuales nos muestran otra perspectiva; el Dios malo.
Entonces, ¿por qué Dios es el creador del mal? En el antiguo testamento se devela que Dios Creó todo lo que existe “y mandó Dios al hombre, diciendo: de todo árbol del huerto podrás comer; pero del árbol del conocimiento del bien y del mal no comerá, porque el día que de él comas, ciertamente morirás” (Génesis, 2:16)², esto quiere decir que también creó el árbol prohibido y con ello inserta el mal en el hombre.
¿Qué se llevaba en manos al crear ese árbol? Obviamente Dios deseaba con todo su ser que comiese el hombre de ese fruto, Dios deseaba que el mal apareciera en el mundo con el objeto de hacer sufrir y divertirse. Si no fuese así jamás hubiese aparecido ese árbol. Por tanto hoy…“¿Qué es lo bueno? Todo lo que eleva en el hombre el sentimiento de poder, la voluntad de poder, el poder mismo.
¿Qué es lo malo? Todo lo que proviene de la debilidad.” (Friedrich Nietzsche, 1995)³
¿Dónde está el Dios malo? En todas partes, es cosa de echar un vistazo al antiguo testamento donde Él, aparte de tentar al hombre a comer del fruto prohibido con la astuta serpiente que alienta a la mujer diciendo: “pero Dios sabe que el día que comáis de él serán abiertos vuestros ojos y seréis como Dios, conocedores del bien y el mal” (Génesis, 3:5)⁴, castiga al hombre al realizar lo esperado echándolos del Edén y dándoles dolor; “a la mujer dijo: multiplicaré en gran manera los dolores en tus embarazos, con dolor darás a luz los hijos, tu deseo será para tu marido y él se enseñoreará de ti.
Y al hombre dijo: por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer y comiste del árbol de que te mandé diciendo: no comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida, espinos y cardos te producirá y comerás plantas de campo. Con el sudor de tu rostro comerás el pan, hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres y al polvo volverás”. (Génesis, 3:16-19)⁵
En la vida cotidiana también hay elementos que nos demuestran el origen maligno de Dios, basta haber experimentado alguna vez en la vida tristeza por la muerte de un ser amado o dolor por una herida. Es aquí donde decimos ¿por qué siendo Dios tan bueno permite esto?...
En la Biblia se recalca mucho sobre el perdón y no ser vengativo hacia el prójimo, lo cual no se da en el propio creador de estos cánones. Dios tan como un juez torcido y demente hasta el día de hoy nos castiga por un pecado que cometieron otras personas (Adán y Eva), mandándonos dolor tras dolor y no conforme, un juicio final estremecedor para el que no cumpla sus ridículas reglas.
Siendo estas reglas opuestas a la naturaleza del ser humano, ya que su cumplimiento conlleva gran sacrificio, sobre todo aquellas relacionadas con los placeres carnales. Sabiendo que "el hombre tiene sobre sí la carne, que es a la vez su carga y su tentación. La lleva, y cede a ella. Debe vigilarla, contenerla, reprimirla; mas si a pesar de sus esfuerzos cae, la falta así cometida es venial. Es una caída; pero caída sobre las rodillas, que puede transformarse y acabar en oración” (Víctor Hugo, 2008)⁶. Y es gracias a esta oración que el gran Dios creador perdonaría nuestras faltas, pero no todas, dejando al hombre obligado a llevar una vida reprimida y aburrida.
Luego de todo esto… ¿De verdad estamos dispuestos a seguir estas ideas descabelladas, teniendo en cuenta que todo es una invención escrita por hombres ambiciosos en un libro al que llamaron Biblia?
“Ni Abraham, ni Moisés vivieron de verdad; ni David y Salomón fueron reyes. Jamás hubo cautiverio en Egipto, mucho menos existió el cruce del Mar Rojo, ni el derrumbe de las murallas de Jericó. Es decir, todo el Antiguo Testamento es una invención, o una falsificación” (Miguel Serrano, 2003)⁷. En realidad toda la Biblia es una utopía, una que crea lo bueno y lo malo, además de ese Demonio que nos mantiene controlados como buen rebaño que debemos ser.
Nos dejamos controlar por un librito del que varios han renegado, demostrando su falsedad; Lee Levine, un profesor de la Universidad Hebrea de Jerusalén, declara que no existen documentos egipcios que se refieran al cautiverio de los judíos y que el Éxodo nunca se llevo a efecto, ni la conquista de Canaán, ni una Jerusalén de David y Salomón. Por su parte, Robert Wexler, Presidente de la Universidad del Judaísmo de Los Ángeles, autor de Mitología del Cercano Oriente, sostiene que el Génesis no nace en Palestina, pudiendo tener su origen en Mesopotamia (hoy Irak) y en la epopeya de Gilgamesh. Así, tampoco nunca existió Noé.
A todo esto también ha hecho referencia The New York Times, en un artículo de Michael Massing, del 13 de marzo del 2002. Asimismo, un periódico de Canadá publicó, en 1988, una crónica de Eliezer Oren, de la universidad Ben Gurión, declarando que las excavaciones realizadas en ochenta sitios de Jerusalén contradicen las afirmaciones de la Biblia. Y en Der Spiegel, de Alemania, en tres páginas, aparecidas en junio de 1987, se llega a la conclusión que los libros de Moisés son de ciencia ficción (Miguel Serrano, 2003)⁸.
Dios o Demiurgo siempre fue, ha sido y seguirá siendo una fantasía del cristianismo con afán de tener poder sobre nosotros, ya que al crearnos un Dios malo nos asustan, nos someten y nos obligan a mantener una cierta vida por sobre a otra, la cual nos ata y nos deja al dominio de los portadores de verdad. Así también estos señores han sido muy astutos en dar a este Dios una fachada de bueno, para que así nos sometamos voluntariamente e inconscientemente a sus mandatos.
Sin embargo no hay que olvidar que si hay una fuerza creadora, pero al no saber cual nos abrazamos a esta mentira que sólo es un medio de control por seres semejantes a nosotros.
En los hombres está la magia de decidir, ser libres y buscar respuestas, estamos sometidos sólo por falta de interés de poseer un existir mejor y lasitud a iniciar ese existir.
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BIBLIOGRAFÍA
1. SERRANO M., “Manú por el hombre que vendrá”; Chile. Nueva Universidad, 1 Edición, 1980;6.
2. Sociedades Bíblicas Unidas, “Santa Biblia”; Brasil, Reina Valera, 43 Edición. 1995; 4. 2:16.
3. NIETZSCHE F., “El anticristo”; Alemania, Tor, 4 Edición, 1994; 2.
4. Sociedades Bíblicas Unidas, “Santa Biblia”; Brasil, Reina Valera, 43 Edición. 1995; 4. 3:5.
5. Sociedades Bíblicas Unidas, “Santa Biblia”; Brasil, Reina Valera, 43 Edición. 1995; 4. 3:16-19.
6. Víctor Hugo, “Los miserables”; Alemania, Tor, 2 Edición. 2008;11.
7. SERRANO M., “El hijo del viudo”. Argentina, Kier, 2 Edición, 2003;5.
8. SERRANO M., “El hijo del viudo”. Argentina, Kier, 2 Edición, 2003;7.
